Storytelling

Existen 8 elementos esenciales para construir una historia. Los seres humanos disfrutan de las historias que siguen una estructura básica y nos hemos vuelto muy buenos aplicando esta estructura a nuestras historias. Los elementos sirven para crear tensión, lo que significa que queremos saber qué sucederá después.

En la era de la “economía de la atención”, en la que ya no es un hecho que las personas presten atención, la narración de historias es vital para garantizar que el público llegue al final de la historia contada de forma atractiva. Si bien los elementos de la historia parecen una fórmula de Hollywood, se pueden aplicar fácilmente a campañas y proyectos.

El siguiente es un gráfico que ilustra el “arco de tensión”, una visualización de los elementos clave.

Tensión y tiempo

La tensión es la sensación que tiene un público al tratar de averiguar qué sucederá a continuación. Una historia requiere de tensión para construirse, por lo que nuestro deseo de encontrar una solución al problema planteado en la historia se hace cada vez mayor a medida que avanza la historia. Como a los humanos nos gusta resolver problemas, queremos enfrentarnos a uno para resolverlo, hacemos una suposición sobre cómo se resolverá el problema y luego vemos si nuestra suposición es correcta. Esta tensión debe aumentar durante la historia. No nos gustan las historias que no van a ninguna parte o las que tienen muy poca tensión.

El tiempo se relaciona con el tiempo de la historia. Una historia puede suceder en unos pocos minutos o puede llevar décadas. Lo importante es que se elija el período de máxima tensión. ¿Se cuenta mejor una historia cronológicamente? ¿O se crea más suspenso al utilizar  flashbacks?

El mundo (im)perfecto

Todas las grandes historias comienzan mostrándonos un mundo perfecto. Incluso si el mundo en el que entramos como público no es un mundo perfecto, para las personas en la historia lo es. Este mundo perfecto termina cuando se introduce el tema central.

El tema central

El tema central es una pregunta de sí o no. Puede ser: “¿El héroe ganará el corazón de la chica?”. Una vez que se ha presentado el mundo perfecto, debemos enfrentarnos a un problema o una búsqueda que el héroe debe resolver. Esta pregunta atraerá al público a tratar de encontrar la respuesta de entre la historia. La respuesta se dará en el clímax de la historia. Hasta el clímax, el espectador debe preguntarse qué podría pasar después.

Tensión creciente

La tensión creciente es creada por los eventos a los que responde el personaje. A los humanos les gustan los giros y los cambios, y las historias con desafíos para el héroe. Una buena historia presenta muchos obstáculos. Queremos ver al héroe intentar y fallar, intentar y fallar y fallar y volver a intentarlo hasta que tenga éxito. Sin obstáculos en el camino (los pasos de tensión creciente), nos sentimos engañados y nos desvinculamos de la historia.

Por ejemplo:

  • El héroe toma el control
  • Hay un impedimento
  • Todo se derrumba
  • El héroe toca fondo
  • El héroe se lo juega todo

Clímax

El clímax es la respuesta al tema central. Es el momento de la historia en el que el personaje es premiado o castigado por adoptar nuevos comportamientos; es un momento de cambio irreversible. En esta parte de la historia obtenemos la respuesta a la pregunta que hemos estado esperando a lo largo de la historia.

Resolución

La resolución es la consecuencia de la historia. Por lo general, el héroe es recompensado y el enemigo castigado. Se restaura el orden y se establece un nuevo mundo perfecto. El final más común en la ficción es “y vivieron felices para siempre…” para concluir el mundo de la narración. Esto se crea para dar al público una emoción final. Una resolución muestra la recompensa que el personaje se ha ganado y brinda una emoción positiva o negativa en el público hacia lo aprendido.

Símbolo

Un símbolo no es un componente estructural de una historia. Más bien es un dispositivo de la historia. Un símbolo en una historia es más que un símbolo en el lenguaje. Un símbolo de historia tiene requisitos específicos y se define de manera diferente a algo “simbólico”.

Un símbolo puede ser un nombre, un lugar, un objeto o cualquier cosa:

  • Que tiene un significado más allá de sí mismo
  • Cuyo significado cambia desde el principio de la historia hasta el final
  • Que se entienda culturalmente

Verdad universal

Una historia es “algo que le sucede a alguien que nos enseña algo”. La verdad universal es la premisa moral de la historia, algo que aprendemos como público. Por lo general es actitudinal y se basa en un cambio emocional. La verdad universal es el significado más profundo de la historia, es lo que le queda al público al final y suele ser un argumento fuerte y una lección de actitud.

Conclusiones clave

  • La historia es la forma en que los humanos disfrutan de obtener información pues contiene emoción.
  • Historia no significa “ficción”, sino es la estructuración de la información de una forma que la hace atractiva.
  • Los seres humanos somos criaturas que resuelven problemas, por eso disfrutamos más viendo la lucha por encontrar una solución que recibiendo la solución ya digerida (pasos de tensión creciente).
  • Los símbolos son esenciales ya que son como pequeñas retazos de las culturas y sensibilidades locales.